Esta semana volvemos al cine clásico con la película de cine mudo Subway Sadie, en la que el metro de Nueva York juega un papel importante.
El viaje en metro que puede cambar tu vida
Subway Sadie es una tragicomedia americana de 1926 dirigida por Alfred Santell (Pasión Salvaje) que es además una adaptación del corto Sadie del desierto.
La película cuenta la historia de Sadie Hermann (Dorothy Mackaill, Una mujer de despacho), una dependienta de Nueva York que cada mañana lucha con la multitud del metro para poder llegar a su trabajo a tiempo. Un día, en uno de sus viajes al trabajo, conoce a Herbert McCarthy (Jack Mulhall, Los tres mosqueteros del desierto), uno de los vigilantes del metro, y ambos se enamoran. Pronto deciden casarse, pero Sadie consigue un ascenso en el trabajo y debe decidir entre el amor y la oportunidad profesional.
Otros detalles de Subway Sadie
De Subway Sadie se podría decir que ofrece una versión de la realidad que se vivía a principios del SXX en Nueva York y en suburbios como el Bronx donde «el metro sale a respirar» como dice la propia protagonista en una escena de la película.
Si nos centramos en el argumento en sí mismo, puede resultar un tanto reprobable, ya que es otro cuento de la Cenicienta moderna, donde una mujer humilde se enamora de verdad de un hombre y al final el karma la recompensa al descubrir que el chico en cuestión resulta ser un joven millonario que mejora su nivel de vida. Pero a Subway Sadie se lo permitimos por el año en el que se rodó.