Esta semana la sección Pinceladas cobra de nuevo todo su sentido, ya que hablaremos de pintura. En concreto analizaremos la obra del romántico Willam Turner titulada Lluvia, vapor y velocidad. El gran ferrocarril del oeste. En ella podemos ver una locomotora de la Great Western Railway cruzando el Támesis por el recién construido Puente Maidenhead.
Lluvia, vapor y velocidad. El gran ferrocarril del oeste. Análisis y repercusión
En este cuadro, el romántico William Turner está sentando las bases de lo que será el posterior movimiento artístico importante: el impresionismo. De hecho, este cuadro es uno de los que se reprodujeron para dar a conocer a Turner, y algunos, como Monet, se fijaron en él. Con Monet comparte el tema del ferrocarril como motivo de sus obras, y el protagonismo de la luz. También son casi impresionistas las pinceladas rápidas y empastadas. El maestro Turner consigue aquí, además de hacernos partícipes de los avances de la revolución industrial, transmitir muy bien la sensación de velocidad. Eso lo consigue con el trazo desdibujado de la locomotora y la diagonal de la vía, que nos da el punto de fuga.
William Turner, pintor de la tormenta
Joseph Mallord William Turner nació en Londres el 23 de abril de 1775. Tras una formación académica apropiada, llegó a convertirse en uno de los paisajistas románticos más conocidos, junto con Constable. Si bien sus obras iniciales se ciñen a las tendencias de la época, pronto empieza a investigar el efecto de la luz y el agua en los colores. Resultado de esto son obras cada vez más enérgicas y caóticas, que se acercan mucho al Impresionismo. Sentía debilidad además por las escenas marítimas, desde pinturas de aguas en calma hasta otras de tormentas enfurecidas. Esta en una de las principales características del autor, su pasión por los efectos del agua.
Fuente: ArteHistoria