La semana ha pasado volando y vuelve a ser jueves. ¿Y qué significa jueves en Ferro Cultura? Pues cine, claro.
Aprovechando que pasamos el mes de octubre en Roma, hoy vamos a hablar de una película ambientada en la capital italiana: Estación Termini, dirigida por Vittorio de Sica en 1953.
El dilema de Mary Forbes
Como su propio nombre indica, Estación Termini está ambientada allí, en la que es la estación ferroviaria más mítica de Roma. En ella nos presentan a Mary Forbes (Jennifer Jones, El coloso en llamas), una estadounidense que debe volver a casa para reencontrarse con su marido y su hija tras unos días visitando a unos familiares en Roma.
Por supuesto, la situación no es tan sencilla. Allí se encuentra también Giovanni (Montgomery Clift, Río Salvaje, De aquí a la eternidad), el joven italiano que ha sido su amante en su estancia en la ciudad y al que se dispone a dejar. Pero de repente algo cambia en la mente de Mary, que no tiene tan claro qué decisión tomar. ¿Volverá con su familia, aunque su vida esté llena de monotonía, o se quedará con Giovanni, su verdadero amor?
Estación Termini pasa a la historia sin pena ni gloria
A pesar de una buena interpretación de sus actores, del guión de Truman Capote, la dirección de Vittorio de Sica (con la que la película consiguió una nominación al Gran Premio de Cannes) y del vestuario de Christian Dior (por el que la cinta también consiguió una nominación al Oscar), Estación Termini no ha conseguido pasar a la historia como una gran película.
La cinta se caracteriza por poseer una atmósfera triste desde el principio y una angustia que envuelve todo el tiempo sin que podamos quitarnos la sensación de injusticia e infelicidad. Además, la ubicación de Estación Termini, con trenes que parten y ajetreo, nos mantiene constantemente incómodos.
Estación Termini se podría incluir en el movimiento neorrealista debido a su trama. Recordemos que el movimiento neorrealista surgió en Italia como reacción a la Segunda Guerra Mundial y se caracteriza por primar los sentimientos de los protagonistas sobre todo lo demás. En una película neorrealista todo está sujeto a cambios, como el destino de Mary Rosby en Estación Termini.
Por si os animáis, os dejamos la película aquí (en italiano, para ambientarnos):